En un esfuerzo conjunto por fomentar la conciencia ambiental desde temprana edad, las Escuelas de Verano de Catapilco, Cachagua y Zapallar se sumaron a una experiencia educativa única con Local Compost. El destino: la planta del Programa de Residuos Orgánicos de la Zona, donde la magia del compostaje cobró vida.
Niños y jóvenes participaron activamente en talleres diseñados para explorar cada rincón del proceso del compost, desde la recolección hasta la transformación final. La energía contagiosa y la atención plena de los participantes hicieron de esta jornada una experiencia inolvidable.
Pero la trascendencia va más allá de los talleres. Las familias se unieron al movimiento, adoptando prácticas sostenibles al separar sus residuos orgánicos. Las expresiones de sorpresa y comprensión sobre la importancia de este gesto ambiental resaltan el impacto positivo del programa.
Como parte del compromiso continuo con la sostenibilidad, los jóvenes exploradores también emprendieron viajes educativos al Humedal, al Cerro la Cruz y al Punto Limpio de Cachagua, consolidando su conexión con el medio ambiente.
Este logro, respaldado por la participación activa de la comunidad, refleja el éxito de la misión de Local Compost en educar, inspirar y transformar prácticas cotidianas en acciones sostenibles. La iniciativa no solo enriquece las comunidades locales, sino que también establece un estándar inspirador para la adopción de prácticas respetuosas con el medio ambiente.
